¿cómo era cuando te enamoraste de mí?

¿cómo eras cuando te enamoraste de mí?

¿cuándo te enamoraste de mí?

¿cuánto me queda?

¿cuánto te queda?

¿cuánto nos queda?

no nos quememos

(las cabezas).

nos comamos

(las bocas),

nos amemos

(las almas).

reenamoremos

(a diario)

como cuando te enamoraste de mí

y yo te amé 

hasta hoy

y desde mañana

para siempre.

todos los dias, otra vez.

Queride niñe por nacer.

Queride niñe por nacer,
hay unas cositas sobre les "grandes que tenés que saber:
Vulneran nuestrxs cuerpos desde nacides.
(y antes también)
Probablemente un "profesional" decida que día y de qué forma vas a nacer,
sin respetar tus tiempos, ni los de tu madre,
tu espacio, ni el de tu madre,
tu sagrado encuentro con ellx,
y tu piel, tu piel que recién conoce la brisa
será manoseada y raspada con toallas ásperas.
Si nacés con vulva,
te pinchan las orejas pa' que no te confundan.
Parece que aquí afuera es un horror que piensen que sos del género "opuesto".
(Acá sólo validan dos géneros)
Si tus tutorxs son un poquito creyentes,
aunque no vayan a la iglesia todos los domingos,
te bautizan.
Aunque no puedas entender de qué se trata esa religión,
dogma de mierda en el que elles creen que creen,
cómplice de genocidios, responsable de discriminación.
Cuando crecés un poquito, te obligan a besar a le tie, ¡¡Aunque no quieras!!
porque tus decisiones de niñx, tu consentimiento, no valen.
"Si querés un caramelo ¡dale un besito a tu tía abuela!"
Perdón si te asusto, pero tené cuidado,
no creas tanto en les adultxs,
que en nombre del Amor, a veces, se olvidan de amarnos.

AmoRnía

Tras la crisis de un evitable verano en la ciudad
cuando pensé que colapsaría
sucedió lo que ya no esperaba
(después de tantas desilusiones)
¡Renací! .
La lluvia regándome
y un arcoiris en mi cielo
me regalaron la memoria de mis raíces,
hoy más fuertes y enraizadas.
El abrazo del compañero,
que tanto me sostuvo,
hoy es el equilibrio hecho danza,
la unión en amor y armonía,
amándonos sin depender,
ni poseer, ni especular,
Parece un sueño estar despierta,
después de tantas pesadillas.
Ya no padecer la vida,
volver a vivirla.

Respirándonos

En qué momento no sé.
Sin planearlo ahí estábamos,
como antes -alguna vez-
y como nunca también.
¿Cómo llegamos aquí?
al lugar en el que los dedos se entrelazan
y los cuerpos se pegan;
No es 'piel', es magnetismo
de nuestras almas que se buscan
(y también se espantan)
¿Qué habrá sido lo que cambio?
- además de todo en nosotres -
Desafiando no se qué ni por qué,
me encuentro gustando de esto,
la sincronía al respirar,
los sueños
y el 'te quiero' que late adentro.
-gracias-

De mi cuaderno...

(28/6 -corregido-)

Puedo sentirte, te rehúsas a mostrarte.
Te mostrás igual, te veo.
La honestidad que te habita te 'traiciona',
me deja ver la ternura que se esconde en la timidez.
No te estoy analizando,
es el reflejo de mis sentires.
No puedo explicarme como me es tan difícil decirte lo que siento,
aunque siempre te lo digo, sin palabras, en cada encuentro.
Serán los miedos, 
ya tan irracionales que ni tienen razón de ser...
¿o sí?
O la conformidad -falsa- de esto...
que es lindo, pero no es.
No es.
No es porque no estamos siendo.
(Te quiero)
Me gusta tu compañía, tu sonrisa media oculta.
La ternura, que ahí está, yo la vi.
No pretendo nada de nada,
me quiero bajar de este juego.
Sólo quiero ser.
Si sabemos, si sentimos...
seamos .

Luna llena de Abril

Mimetizadas, conectadas, creo, llegamos juntas al plenilunio.
Mientras ella en la inmensidad de su esencia se mostraba creciendo, iluminada,
acaricié mi útero y me amé, reconciliándome conmigo y mis fantasmas.
Me abracé y me dormí, feliz y reencontrada...
no me sentí sola esta vez.
Pero este proceso que vengo atravesando, no pretende ser el más feliz y pleno...
La Luna me dio mis caricias pero no sin obligarme a que me replantee mis miedos.
Quizás con la fuerza que yo misma me había dado,
me entregué a la reflexión y la desnudez de mis sentires.
Asumir que amo, que siento y que extraño.
Quién soy y quién espero/pretendo ser.
Lloré a lxs hijxs del desamor, esxs que crecieron rodeados de violencia
y me lamenté no ser una diosa madre que pudiera ajusticiar la falta de amor en el mundo.
Quise fantasear con la idea de ser heroína
y me perdí tanto que no me dí cuenta que ni siquiera podía conmigo.
Fue intensa esta Luna, ¿cuál no lo es?
Estoy intensa yo también.

¿Qué tan profundo puede ser el pozo?

Conocí la libertad, la paz y la hermandad.
Viví en familia y armonía, con el corazón lleno de tranquilidad.
Me amé y amé sin juzgar(nos).
Aprendí a abrazar y a decir 'no'.
Me detuve a mirar la mar agradecida con la vida.
 Medité en silencio y en compañías.
Lloré y me sentí muy bien por hacerlo.
Me reencontré con un amor de otra vida y nos volvimos a amar.

Me sentí cansada y atrapada, volví a la ciudad.
El cementó se endureció con mis pies enterrados.
 El amor me dijo 'tendrás que desapegarte' y comprendí.
 La amistad se hizo a distancia y los abrazos solo en sueños.
 Lloré, pero ya no quería hacerlo.
Volví a casa esperando un consuelo y recibí quejas.
 Me olvidé que acá las cosas son de otra manera.
 Me resigné al 'no queda otra' y me consolé con el 'ya pasará'.
 Me cansé. Estoy cansada.
Estoy triste y desganada.
No sé ya ni qué hacer ni cómo hacerlo.
 Una cosa lleva a la otra y me siento encerrada en mi laberinto.

Ni volver el tiempo atrás, ni que vuelva quién se fue.
 Quiero que este presente me deje de aplastar con mis miedos
y no quiero joderme nunca más.
El vacío en el pecho,
en el útero,
en el alma.
El dolor ya cansado
el ya nada sentir.
El ser todo faltal
y esta mierda que apesta.

Luna Creciente

Me sonríe,
desespero.
Emergen sensaciones en mí.
Querer tocarla, besarla, sentirla.
La veo crecer,
me gusta.
La siento en mí,
deseo más.
Y allá la veo,
lejana,
inalcanzable.
Ella sólo quería que supiera,
esto también lo puedo sentir.
Se va, a otros cielos.

Caricia en la espalda,
que me saque esta contractura.
Abrazo al alma,
que me lleve a lugares que ya no existen.
Hombro que pueda regar,
con las lágrimas de este otoño.
Mano, junto a mi mano,
palma con palma,
mirada y mirada,
la música del encuentro:
los corazones latiendo.
Siempre puedo sola,
excepto hoy.

no sé

El juego infantil, mi cabeza. Me río. No puedo pensar tanto. Me vuelvo a reir: si puedo, lo estoy haciendo. Es gracioso porque es, y ya. tantas vueltas me marean pero que divertido puede llegar a ser. Y se trata de mí, solamente de mí. Soy yo contra mí misma/conmigo misma. Soy yo siendo estúpida y yo consolándome, también soy yo riéndome de mi estupidez, y yo diciéndome "ey, no te sientas estúpida, no lo sos". Es mi cabeza en mil partes sintiéndose infantil por no poder resolver esas pavadas, esas pavadas que siempre tuvo tan claras... (já, caiste!). Y a la vez es la felicidad que me genera saber que puedo sorprenderme a mí misma con todos estos juegos... sí, juegos. Me vuelvo más niña de lo que creía ya posible y me pongo a saltar en un castillo inflable de sentimientos ¡qué gilada!. Como si sentir fuera algo serio y estructurado. Bienvenidx a mí misma.